1. Mayores oportunidades económicas: Las fronteras abiertas y el libre comercio han generado mayores oportunidades económicas para los europeos occidentales. Esto se debe a que las empresas ahora pueden obtener bienes y mano de obra de una gama más amplia de países, lo que ha llevado a precios más bajos y más opciones para los consumidores. Además, las fronteras abiertas han facilitado que los europeos occidentales viajen y trabajen en otros países, lo que también ha generado mayores oportunidades laborales.
2. Precios más bajos: Las fronteras abiertas y el libre comercio han llevado a precios más bajos de bienes y servicios. Esto se debe a que las empresas ahora pueden competir entre sí a escala global, lo que las ha obligado a bajar sus precios. Además, la eliminación de aranceles y otras barreras comerciales ha facilitado que las empresas importen bienes de otros países, lo que también ha llevado a precios más bajos.
3. Más opciones: Las fronteras abiertas y el libre comercio han generado más opciones para los consumidores. Esto se debe a que las empresas ahora pueden ofrecer una gama más amplia de bienes y servicios de la que podrían ofrecer si se limitaran a comerciar con sólo uno o dos países. Además, las fronteras abiertas han facilitado que los consumidores compren productos de otros países, lo que también ha generado más opciones.
4. Aumento de la diversidad cultural: Las fronteras abiertas y el libre comercio han llevado a una mayor diversidad cultural en Europa occidental. Esto se debe a que personas de todo el mundo han podido trasladarse a Europa occidental y traer consigo sus propias culturas. Además, el mayor flujo de bienes y servicios entre países ha llevado a un mayor intercambio de ideas y culturas.
5. Aumento de los desafíos sociales: Las fronteras abiertas y el libre comercio también han generado algunos desafíos sociales en Europa occidental. Por ejemplo, el mayor flujo de personas hacia Europa occidental ha ejercido presión sobre los servicios públicos, como la vivienda, la educación y la atención sanitaria. Además, la mayor competencia de los trabajadores extranjeros ha provocado algunas pérdidas de empleos en Europa occidental.
En general, las fronteras abiertas y el libre comercio han tenido un impacto significativo en las vidas de los europeos occidentales, tanto positivo como negativo.