Buscar riqueza :Los europeos conocían bien la riqueza y los bienes de lujo en Oriente (India y China) gracias a las rutas comerciales dominadas por los turcos otomanos y el sultanato mameluco de Egipto. Para evitar a estos intermediarios y asegurar el acceso directo a los productos asiáticos, los europeos buscaron rutas alternativas.
Conquista otomana :La caída de Constantinopla, la capital del Imperio Bizantino, ante los turcos otomanos en 1453 interrumpió las rutas comerciales entre Europa y Asia, lo que motivó aún más a los europeos a encontrar rutas alternativas hacia el Este.
Avances en la navegación :A finales de la Edad Media se produjeron avances significativos en las técnicas y la tecnología de navegación, como brújulas, astrolabios y velas latinas mejorados. Estos avances hicieron posible navegar en mar abierto, ampliando el potencial de exploración.
Deseo de difundir el cristianismo :La expansión del cristianismo se convirtió en una motivación importante para la exploración europea, con muchos viajes acompañados de celo religioso y el deseo de convertir a los pueblos indígenas al cristianismo.