2). Operaciones de tierra y naval coordinadas: Grant coordinó sus fuerzas terrestres con la marina de la Unión, dirigida por el almirante David Farragut. La Marina pasó con éxito las baterías confederadas en el río Mississippi, dando el control de la Unión del río y cortando las líneas de suministro de Vicksburg.
3). Tácticas de asedio y atrincheraciones: Grant empleó técnicas de guerra de asedio, rodeando lentamente Vicksburg y cavando trincheras más cerca de la ciudad. Esta estrategia permitió a las fuerzas de la Unión debilitar gradualmente las defensas confederadas y limitar su maniobrabilidad.
4). Falta de refuerzos confederados: A diferencia de los intentos anteriores de capturar a Vicksburg, los esfuerzos del general confederado Joseph E. Johnston para reforzar la ciudad se retrasaron y finalmente no tuvieron éxito debido a las fuerzas de la Unión que lo involucraron en la batalla de Champion Hill.
5). Hambre y rendición: Las tácticas de asedio provocaron una escasez de alimentos y suministros en Vicksburg. Ante la hambruna, el comandante confederado, el general John C. Pemberton, finalmente entregó la ciudad el 4 de julio de 1863.
6). Manpower y recursos superiores de la Unión: El ejército de la Unión tenía una importante ventaja numérica sobre los confederados, tanto en términos de soldados como de artillería. Esto permitió a Grant mantener la presión sobre la ciudad y resistir los contraataques confederados.
7). Baja moral entre las tropas confederadas: El asedio prolongado, la disminución de los suministros y el bombardeo constante desmoralizaron a las tropas confederadas, lo que las hace menos efectivas para defender la ciudad.
En conclusión, el asedio exitoso de Vicksburg fue el resultado de una combinación de la determinación de Grant, las operaciones militares coordinadas, las tácticas de asedio efectivas y la abrumadora fuerza y recursos del ejército de la Unión.