Los ciudadanos votaron en asambleas por tribu o clase social. El sistema de votación romano se basaba en un complejo sistema de asambleas y concilios. La asamblea más importante fue la Comitia Centuriata, que votaba leyes y elegía magistrados. Los Comitia Centuriata se dividieron en 193 centurias, o unidades de votación, según la clase social y la riqueza. Los ciudadanos más ricos obtuvieron la mayor cantidad de votos, mientras que los ciudadanos más pobres solo obtuvieron un voto.
La votación fue abierta y pública. Los ciudadanos emiten sus votos colocando una tablilla de madera en una urna. Las tablillas estaban marcadas con los nombres de los candidatos o los temas que se votaban.
El candidato con más votos ganó las elecciones. Si ningún candidato obtenía la mayoría de los votos, se llevaba a cabo una segunda vuelta.
El proceso de votación fue supervisado por magistrados. Los magistrados eran responsables de garantizar que la votación fuera justa y honesta. También contaron los votos y anunciaron a los ganadores.
El sistema de votación romano no siempre fue justo o democrático. Los ciudadanos ricos tenían mucho más poder de decisión en el gobierno que los ciudadanos pobres. Esto a menudo condujo a la corrupción y al abuso de poder. Sin embargo, el sistema de votación romano fue un importante paso adelante en el desarrollo de la democracia.