- Incursiones y Saqueos: Los visigodos inicialmente se centraron en incursiones y saqueos de territorios romanos en lugar de conquistas completas. Apuntaron a ciudades y provincias ricas y acumularon grandes cantidades de riqueza.
- Explotación de la inestabilidad política romana: Los visigodos se aprovecharon de la inestabilidad política dentro del Imperio Romano. A menudo apoyaban a pretendientes rivales al trono, utilizando esto como pretexto para obtener concesiones o acceso a territorios romanos.
- Alianzas con otras tribus bárbaras: Los visigodos formaron alianzas con otras tribus bárbaras para potenciar su fuerza militar. Cooperaron con grupos como los vándalos, los alanos y los suevos.
- Guerra de guerrillas: Los visigodos emplearon tácticas de guerrilla contra las fuerzas romanas. Sus unidades móviles de caballería utilizaron tácticas de ataque y fuga, evitando la confrontación directa con ejércitos romanos más grandes.
- Guerra de asedio: Los visigodos también utilizaron la guerra de asedio para capturar ciudades fortificadas. Emplearon arietes, torres de asedio y otros dispositivos para romper las defensas romanas.
Los ostrogodos
- Diplomacia y Alianzas: Los ostrogodos dependían más de la diplomacia y las alianzas que los visigodos. A menudo negociaban tratados con los emperadores romanos y desempeñaban un papel como foederati, auxiliares del ejército romano.
- Infiltración y Asentamiento: Los ostrogodos gradualmente se infiltraron y se asentaron en territorios romanos. Aprovecharon el declive del poder militar romano y establecieron sus asentamientos en diversas partes del imperio.
- Integración y Asimilación: A diferencia de los visigodos, los ostrogodos mostraron una mayor disposición a integrarse con la población romana. Adoptaron muchos aspectos de la cultura, el idioma y la administración romana, lo que les permitió establecer una presencia más estable y duradera en Italia.