Los peregrinos creían que la Biblia era la Palabra de Dios literal e inerrante. Se referían a ella como "las Sagradas Escrituras" y estimaban su autoridad por encima de cualquier otra fuente humana. La Biblia era una fuente de guía, comprensión espiritual e instrucción en todos los aspectos de la vida.
2. Énfasis en la relación personal con Dios
Los peregrinos enfatizaron una relación personal con Dios a través de Jesucristo. Creían en las doctrinas de la salvación por gracia, la fe en Cristo únicamente y la presencia interior del Espíritu Santo. El crecimiento espiritual individual y un caminar cercano con Dios eran centrales para su práctica religiosa.
3. Gobierno de la Iglesia Congregacional
Los peregrinos creían en el concepto de "iglesia reunida" o "comunidad de pacto". Practicaban una forma de gobierno de la iglesia congregacional, donde cada iglesia local era autónoma y sus miembros tomaban decisiones colectivamente. Rechazaron las estructuras jerárquicas y favorecieron la participación directa de los laicos.
4. Separación de la Iglesia de Inglaterra
Los peregrinos eran puritanos que buscaban libertad religiosa de la Iglesia de Inglaterra, que creían que se había desviado de las enseñanzas bíblicas e impuesto un control eclesiástico opresivo. Salieron de Inglaterra en busca de un lugar donde practicar su fe libremente y sin interferencias del estado.
5. Sencillez y estricta observancia del sábado
Los peregrinos abogaron por la simplicidad en el culto y el estilo de vida. Hicieron hincapié en la obediencia a los mandamientos de Dios, evitando la ornamentación excesiva y llevando un estilo de vida modesto. La observancia del sábado (domingo) se consideraba un tiempo sagrado dedicado al descanso, la adoración y las actividades religiosas.
6. Valor de la educación y la alfabetización
Los peregrinos dieron gran importancia a la educación y la alfabetización. Establecieron escuelas y enfatizaron la importancia de aprender y comprender las Escrituras. La educación era vista como un medio para fortalecer su fe, nutrir el desarrollo espiritual de sus hijos y preservar los valores y conocimientos religiosos de su comunidad.
7. Comunidad de Santos y Apoyo Mutuo
Los peregrinos creían en la idea de una comunidad de santos, donde cada miembro se apoyaba, edificaba y animaba unos a otros en su camino espiritual. Proporcionaron ayuda y asistencia mutua a los necesitados, formando comunidades muy unidas unidas por creencias y valores compartidos.