* Efectivo: Esta era la forma de pago más común, y normalmente la pagaban los viajeros que se encontraban de paso por la zona.
* Crédito: Los posaderos a menudo concedían crédito a sus clientes habituales, quienes luego pagaban sus facturas en una fecha posterior.
* Trueque: Los posaderos a veces aceptaban bienes o servicios a cambio de alojamiento y comida. Esto podría incluir cualquier cosa, desde comida y bebida hasta leña y trabajo agrícola.
* Viáticos: Algunos posaderos cobraban una tarifa diaria, que era una cantidad fija de dinero pagada por cada día que un huésped se hospedaba en la posada.
* Propinas: En ocasiones, los huéspedes también daban propinas a los posaderos. Estas gratificaciones generalmente se otorgaban en forma de dinero en efectivo o pequeños obsequios.
La cantidad de dinero que podía ganar un posadero variaba dependiendo de varios factores, incluida la ubicación de la posada, el tamaño de la posada y la cantidad de huéspedes que atraía. Sin embargo, en general los posaderos podían ganarse la vida cómodamente con su trabajo.