- Disponibilidad de materias primas: Las piedras estaban disponibles en muchas partes del mundo y podían moldearse y utilizarse fácilmente para diversos fines.
- Necesidad de herramientas: A medida que los primeros humanos evolucionaron y comenzaron a participar en actividades como la caza, la recolección y la defensa, necesitaron herramientas que les ayudaran en estas tareas. Las piedras eran ideales para fabricar herramientas sencillas pero eficaces.
- Avances tecnológicos: Con el tiempo, los primeros humanos desarrollaron y refinaron sus técnicas de fabricación de herramientas de piedra, lo que llevó a la creación de herramientas más especializadas y eficientes.
- Factores culturales y sociales: El uso de herramientas de piedra se convirtió en una parte arraigada de la cultura y la sociedad humanas. Estas herramientas se transmitieron de generación en generación y su uso se volvió tradicional y habitual.
Es importante señalar que la Edad de Piedra no fue un período de tiempo específico, sino más bien un término amplio utilizado para describir el período de la historia humana en el que las herramientas de piedra eran la tecnología principal. Diferentes regiones del mundo pasaron de la Edad de Piedra a períodos posteriores en diferentes momentos en función de diversos factores, incluidos los desarrollos geográficos, culturales y tecnológicos.