1. Tributación sin Representación: A los colonos les molestaba la imposición de impuestos y otras regulaciones por parte del Parlamento británico a las colonias sin darles representación en el proceso de toma de decisiones. El famoso eslogan "No hay impuestos sin representación" capturó su frustración.
2. Actos intolerables: En respuesta al Motín del Té de Boston y otras protestas, los británicos aprobaron las Leyes Coercitivas, también conocidas como Leyes Intolerables, en 1774. Estas leyes restringieron aún más los derechos de los colonos y provocaron mayores tensiones.
3. Deseo de autogobierno: Los colonos tenían un creciente sentido de identidad propia y un deseo de mayor autonomía y autogobierno. Intentaron establecer sus propias instituciones políticas y gobernarse a sí mismos sin la interferencia británica.
4. Ideales de la Ilustración: Los colonos fueron influenciados por las ideas de la Ilustración, que enfatizaban la libertad individual, los derechos naturales y el derecho a resistir a un gobierno opresivo. Estos ideales proporcionaron una justificación filosófica para su lucha contra la autoridad británica.
5. Control de Recursos y Tierras: Los colonos querían tener control sobre sus propios recursos naturales y la capacidad de expandirse hacia el oeste sin restricciones ni interferencias británicas.
6. Libertad religiosa: Algunos colonos, especialmente los de religiones no anglicanas, buscaron una mayor libertad religiosa que la permitida bajo el dominio británico.
7. Políticas británicas coercitivas: El uso de la fuerza y la violencia por parte del ejército británico contra los colonos, como la masacre de Boston en 1770, avivó aún más las tensiones y alimentó el deseo de independencia de los colonos.
Estos factores se combinaron para crear un fuerte deseo de independencia entre los colonos, lo que los llevó a luchar contra el dominio británico y, en última instancia, establecer los Estados Unidos de América.