Michel Eyquen de Montaigne (1533-1592) es un escritor francés famoso por sus "ensayos", su única obra. Gran humanista, se inclinó por la tolerancia entre los seres y el respeto por la diferencia, estableciendo los primeros principios según los cuales la Sociedad debe estar al servicio del hombre y no al revés. Amante de comunicar y haciendo de ella su filosofía, siempre ha abogado por el diálogo y la reflexión más que por la violencia y la acción, como escribe en sus Ensayos "la palabra es mitad para quien habla, mitad para quien escucha o "nuestro bien y nuestros males son culpa nuestra" y finalmente "no hay tan dulce consuelo en la pérdida de nuestros amigos como el que nos aporta la ciencia de no haber olvidado nada que decirles, y de haber tenido con ellos una comunicación perfecta y completa”.
La juventud de Montaigne
Michel Eyquem de Montaigne nació el 28 de febrero de 1533 en la finca de la familia Périgord. Su bisabuelo, un comerciante de Burdeos, había comprado esta casa del siglo XIV, llevando así el título de Señor de Montaigne que transmitió a sus herederos.
Michel, el mayor de ocho hermanos, fue primero acogido y luego educado en el castillo familiar, a las puertas de Bergerac. y Saint-Émilion. A la edad de siete años, después de haber aprendido griego, hablaba con fluidez latín con su tutor alemán (que sólo hablaba latín) y los sirvientes del castillo. Luego, en el Collège de Guyenne de Burdeos, demostró ser un estudiante brillante tanto por sus debates como por su adaptación a la enseñanza humanista y su gusto por el teatro. Sus estudios de Derecho en Toulouse le llevaron al cargo de Consejero del Tribunal de Ayuda de Périgueux en 1554, y luego al Parlamento de Burdeos en 1557, donde permaneció allí durante quince años. En el aspecto político, se involucró en conflictos religiosos y participó en el asedio de Rouen.
En Burdeos, conoce a Etienne de la Boétie , humanista, poeta y autor del Discurso sobre la servidumbre voluntaria , que jugará un papel importante en la vida de Michel de Montaigne. Unidos por una gran y profunda amistad, Montaigne quedó muy afectado cuando La Boétie desapareció en 1563, arrastrada por la peste. Luego comenzó a escribir los Ensayos y le dedicó esta frase "porque era él, porque era yo".
Este vacío dejado por La Boétie no se llenará a pesar de su matrimonio con Françoise de la Chassaigne en 1565 y de las seis hijas que tendrá con su esposa, de las cuales sólo una sobrevivirá. .
castillo de Montaigne
Cuando su padre murió en 1568, heredó una gran fortuna y el dominio de Montaigne , en un majestuoso parque con trazados deseados por Montaigne. Después de haber vendido su cargo de parlamentario en 1570, estando su habitación en el primer piso, hizo instalar su “biblioteca” en el último piso de una de las torres del castillo (torre visitable). Allí, entre los mil libros que posee, además de los que le legó La Boétie, medita, huyendo de las limitaciones familiares:“éste es mi asiento. Intento hacer puro mi dominio y retirar este único rincón a la comunidad conyugal, filial y civil”. En su guarida hizo grabar en las vigas del techo máximas de textos antiguos y frases extraídas de la Sagrada Escritura y comenzó a escribir sus Ensayos:"Quiero que la gente me vea en mi forma sencilla, natural y ordinaria, sin contiendas ni artificios:porque Soy yo quien pinto”. Se describe a sí mismo sin artificios, para entenderse a sí mismo y al mundo. La primera colección en dos volúmenes se publicó en 1580.
Continuando su vida social y política, nombrado caballero ordinario de la cámara del rey en 1573, fue enviado en 1574 a una misión en el parlamento de Burdeos y luego como mediador para intentar acercar a Enrique III y al futuro Enrique IV. Enrique de Navarra iba regularmente a pedir consejo a Montaigne, puso su castillo a disposición del rey, ofreciéndole comida y partidas de caza de ciervos en el vasto dominio. También participó activamente en la guerra civil hasta 1577.
Sus últimos años
Pero una enfermedad (grava) lo obligó a partir de 1580 a viajar a ciudades balneario de Europa. Atravesó Suiza, Alemania e Italia, donde obtuvo la ciudadanía romana. Así escribió un Diario de Viaje, relatando sus aventuras, sus reflexiones sobre los usos y costumbres de diferentes países, así como sus sentimientos ante el dolor. Este manuscrito no se publicará hasta su descubrimiento en 1774.
Recién elegido alcalde de Burdeos En septiembre de 1581, Enrique III lo llamó urgentemente mientras se encontraba en los baños de Lucca. Ejercerá esta función hasta 1585, pero abandona su cargo durante la epidemia de peste que azota la región. Durante este tiempo, trabajó en una nueva edición de los Ensayos en 1582 con más de seiscientas adiciones, que publicó en 1588. Aún en París en 1588, fue encarcelado por orden de la Liga, pero rápidamente fue liberado por Catalina de Médicis. Conoció a su futura hija adoptiva Marie Le Jars de Gournay, quien publicaría una edición póstuma de los Ensayos denominada "edición de Burdeos", tres años después de la muerte de Montaigne.
Cada vez más enfermo, rara vez sale de su "biblioteca" y de su habitación en su torre. Allí escucha las misas celebradas en la pequeña capilla de la planta baja (agujero en la pared que aún hoy se puede ver), sin tener ya fuerzas para moverse. El 13 de septiembre de 1592 murió entre sus vecinos más cercanos, durante la misa en el momento de la Elevación. Tiene cincuenta y nueve años.
La obra de Montaigne
el trabajo de Montaigne es sobre todo el de un moralista, decepcionado por la violencia y la intolerancia de su tiempo. La época de los poetas refinados ya pasó:el escepticismo de Montaigne, ilustrado por su famoso “¿Que sais-je? “, expresa el fin de un impulso literario “optimista” y de la inspiración humanista de principios de siglo. Es cierto que Montaigne estudia al hombre y tiene fe en la razón, pero más bien es un psicólogo lúcido y desilusionado que un crítico reformador.
- Los ensayos de Michel de Montaigne (en francés moderno). Gallimard, 2009.
Bibliografía y biografías de Montaigne
- Montaigne, biografía de Arlette Jouanna. Gallimard, 2017.
- Montaigne, biografía de Stefan Zweig. PUF, 2012.