Luis XIV, que sufrió las guerras de la Fronda cuando era niño, nunca dejó de subyugar a la nobleza. La regencia de su madre Ana de Austria terminó con la muerte del cardenal Mazarino que gobernó en la sombra, Luis XIV tomó pues plenos poderes hasta su muerte, teniendo los ministros ahora una sola opinión consultiva (Colbert). Su matrimonio con Marie-Thérèse en 1659 firmó la paz con España. Trasladó la corte a Versalles en 1684, que transformó en un increíble palacio vaciando las arcas del Estado. El esplendor de su Corte salpica a las Cortes vecinas. El orden y el clasicismo están a la orden del día, todo está regulado hasta en los platos. Sometiendo a su pueblo a su religión, revocó el Edicto de Nantes en 1685. Aumentó el déficit de su reino librando guerras contra sus vecinos (España, Holanda, etc.). El cinturón de Vauban (red de fortificaciones construidas por el arquitecto Vauban) impide las invasiones. Luis XIV simboliza el absolutismo:nada es demasiado lujoso para este rey cuyo emblema es el sol. Bajo su reinado, Francia estaba en la cima de su poder.
5 de septiembre de 1638 - 1 de septiembre de 1715
Estado
Rey de Francia