El número relativamente bajo de muertes en Estados Unidos puede atribuirse a varios factores. En primer lugar, las tropas estadounidenses desembarcaron en playas menos defendidas que aquellas en las que desembarcaron británicos y canadienses. En segundo lugar, las tropas estadounidenses contaban con más apoyo aéreo y naval que los británicos y canadienses. En tercer lugar, las tropas estadounidenses estaban mejor entrenadas y equipadas que las británicas y canadienses.
En general, el número de muertos en Estados Unidos el Día D fue relativamente bajo en comparación con el de otras naciones aliadas involucradas en la operación.