1. Tributación sin representación: Los colonos estaban frustrados por el hecho de que el Parlamento británico les cobraba impuestos sin tener ninguna representación en el proceso de toma de decisiones. Esto fue una violación de sus derechos como súbditos británicos.
2. Actos intolerables: En 1774, el Parlamento británico aprobó una serie de leyes conocidas como Leyes Intolerables en respuesta al Boston Tea Party. Estas leyes incluían la Ley del Puerto de Boston, que cerró el puerto de Boston hasta que los colonos pagaran el té que había sido destruido; la Ley del Gobierno de Massachusetts, que restringió los poderes del gobierno colonial; y la Ley de Quebec, que dio a Canadá más territorio y permitió la libre práctica del catolicismo. Los colonos consideraban que estas leyes eran opresivas y alimentaron aún más su ira hacia los británicos.
3. Actos coercitivos: Las Leyes Coercitivas fueron una serie de leyes punitivas aprobadas por el Parlamento británico en 1774 en respuesta al Boston Tea Party. Las Leyes Coercitivas cerraron el puerto de Boston, restringieron las reuniones municipales y permitieron que las tropas británicas fueran acuarteladas en casas privadas. Estos actos fueron vistos como una violación de los derechos de los colonos y aumentaron aún más las tensiones entre los colonos y el gobierno británico.
4. Ocupación militar: Los británicos estacionaron un gran número de tropas en las colonias para hacer cumplir sus políticas. Esto fue motivo de irritación para los colonos, que lo vieron como una amenaza a su libertad e independencia.
5. Políticas económicas: El gobierno británico impuso una serie de políticas económicas a las colonias que se consideraban injustas y perjudiciales para la economía local. Estas políticas incluyeron restricciones al comercio, aranceles elevados y la prohibición de ciertas industrias.
6. Diferencias culturales: Los colonos estaban cada vez más resentidos por los valores culturales y sociales británicos que se les estaban imponiendo. Sintieron que estaban perdiendo su propia identidad y forma de vida únicas.
Todos estos factores contribuyeron a la creciente ira y frustración de los colonos, lo que finalmente condujo a la Revolución Americana.