Historia:
- A principios del siglo XIX, la nación Cherokee había establecido una sociedad próspera y próspera en sus países de origen en Georgia, Tennessee, Carolina del Norte y Alabama. Habían adoptado muchas costumbres europeo-americanas, incluida una constitución escrita y una forma representativa de gobierno.
- Sin embargo, el descubrimiento de oro en tierras Cherokee despertó el interés y la codicia entre los colonos no nativos y el gobierno de Estados Unidos. Creció la presión para reubicar a los Cherokee de sus tierras ancestrales en el Sudeste.
- En 1830, la Ley de Expulsión de Indios, firmada por el presidente Andrew Jackson, autorizó al gobierno federal a negociar tratados para el intercambio de tierras de nativos americanos en el Este por territorios en el Oeste.
- Los Cherokee resistieron estos esfuerzos y buscaron medios legales para proteger sus derechos. Presentaron un caso ante la Corte Suprema de Estados Unidos en el famoso caso Worcester contra Georgia (1832). El tribunal falló a favor de los Cherokee, afirmando su derecho al autogobierno en sus tierras ancestrales.
- A pesar de esta victoria legal, el gobierno de Estados Unidos, bajo el presidente Martin Van Buren, se negó a hacer cumplir la decisión del tribunal y continuó presionando a los Cherokee para que aceptaran la expulsión.
El rastro de las lágrimas:
- Al no tener otra opción viable, los líderes Cherokee firmaron el Tratado de Nueva Echota en 1835, por el que cedían sus tierras orientales a cambio de tierras en territorio indio.
- El gobierno de Estados Unidos organizó una expulsión forzosa de los cherokee de sus países de origen, que comenzó en 1838. Aproximadamente 15.000 cherokee fueron obligados a marchar a pie a lo largo de un camino de más de 1.000 millas desde el sureste hasta el territorio indio.
- El viaje fue traicionero y miles de cherokee murieron en el camino por exposición, hambre, enfermedades y malos tratos. Se estima que hasta 4.000 personas Cherokee perdieron la vida durante el traslado forzoso.
- El intenso dolor, el sufrimiento y la angustia que sufrieron los Cherokee en este viaje dieron lugar al nombre "Trail of Tears" como recordatorio de las trágicas consecuencias del traslado forzoso y el impacto devastador que tuvo en su nación.