Varias tribus nativas americanas tienen sus versiones únicas de la danza de la lluvia, con rituales, canciones y danzas específicas. La ceremonia suele implicar la participación de toda la comunidad, y las personas asumen funciones y responsabilidades específicas. La vestimenta tradicional, los tambores y los cantos acompañan la danza, creando una atmósfera sagrada.
La danza de la lluvia se lleva a cabo durante épocas específicas del año, generalmente durante la estación seca, cuando la necesidad de lluvia es más apremiante. La danza se considera una poderosa expresión espiritual del deseo colectivo de la comunidad de tener humedad que sustente la vida.
Si bien la danza de la lluvia se asocia principalmente con las culturas nativas americanas, también se pueden encontrar rituales y ceremonias similares en otras comunidades indígenas de todo el mundo, cada una con su significado y contexto cultural únicos.