Hay muchas leyendas e historias diferentes sobre dragones en la mitología china. Una leyenda popular cuenta la historia de Nüwa, la diosa que creó a los humanos. Después de crear humanos, a Nüwa le quedó un poco de arcilla extra y la usó para crear dragones. Los dragones fueron diseñados con muchos colores, formas y tamaños diferentes. Se decía que algunos eran tan grandes que podían cubrir el cielo, mientras que otros eran lo suficientemente pequeños como para caber en una taza de té.
A menudo se representa a los dragones con cuerpos largos y serpentinos, con garras, escamas y alas. Se dice que pueden volar, nadar y escupir fuego. Los dragones también suelen asociarse con el agua, ya que se dice que viven en ríos, lagos y mares.
En la cultura china, los dragones son vistos como criaturas poderosas y majestuosas. A menudo son venerados como dioses y se dice que pueden conceder deseos. Los dragones también se consideran símbolos de fuerza, coraje y buena suerte.
Durante el Año Nuevo chino, se realizan danzas de dragones para traer buena suerte y ahuyentar a los espíritus malignos. La gente también adorna sus hogares con adornos de dragones y los niños visten disfraces de dragones. Estas tradiciones ayudan a crear un ambiente festivo y son un recordatorio de la importancia de los dragones en la cultura china.