La Revolución Industrial fue impulsada por nuevas tecnologías, como la máquina de vapor, la hiladora y el telar mecánico. Estas tecnologías hicieron posible que los bienes se produjeran más rápido y más barato que nunca, lo que provocó un aumento de la producción industrial.
2. Acceso a Materias Primas
Estados Unidos tenía abundantes recursos naturales, como carbón, mineral de hierro y madera, que eran esenciales para la producción industrial. Esto dio a los fabricantes estadounidenses una ventaja significativa sobre sus competidores europeos.
3. Mano de obra inmigrante
Millones de inmigrantes de Europa y Asia llegaron a Estados Unidos durante el siglo XIX. Proporcionaron la mano de obra barata que era esencial para el funcionamiento de las fábricas y la construcción de infraestructura.
4. Políticas gubernamentales
El gobierno de Estados Unidos también jugó un papel en la promoción de la industrialización. El gobierno proporcionó aranceles para proteger a los fabricantes estadounidenses de la competencia extranjera y otorgó concesiones de tierras a los ferrocarriles, lo que ayudó a conectar los mercados del país.