Historia de América del Norte

¿Cuál fue la postura de Estados Unidos cuando comenzó la Primera Guerra Mundial?

Al comienzo de la Primera Guerra Mundial en 1914, Estados Unidos mantuvo una política de neutralidad. El país pretendía evitar involucrarse en el conflicto que había envuelto a Europa, reconociendo las complejas dinámicas y alianzas políticas que dividían el continente. El presidente Woodrow Wilson declaró que Estados Unidos permanecería "imparcial" y buscó fomentar la paz y la neutralidad entre sus ciudadanos.

Sin embargo, mantener una postura neutral se volvió cada vez más difícil a medida que avanzaba la guerra y sus implicaciones geopolíticas se hacían más pronunciadas. Estados Unidos tenía relaciones comerciales tanto con las potencias aliadas (Francia, Gran Bretaña y más tarde Rusia) como con las potencias centrales (Alemania y Austria-Hungría), y hubo un debate considerable sobre las posibles consecuencias de proporcionar ayuda o apoyo a cualquiera de las partes. .

Si bien inicialmente Estados Unidos permaneció oficialmente neutral, la simpatía y el apoyo públicos hacia las potencias aliadas comenzaron a crecer a medida que se intensificaba la guerra. El uso por parte de Alemania de la guerra submarina sin restricciones y el hundimiento de buques mercantes neutrales, como el Lusitania en 1915, causaron indignación en los Estados Unidos. El creciente peligro para las vidas y los intereses comerciales estadounidenses provocó un cambio en la opinión pública hacia la intervención en apoyo de los aliados.

A pesar de estos cambios de actitud, Estados Unidos continuó adhiriéndose oficialmente a la neutralidad hasta 1917. El presidente Wilson buscó activamente promover negociaciones de paz y medió entre las partes en conflicto, expresando su deseo de evitar conflictos innecesarios. Sin embargo, las tensiones con Alemania aumentaron tras su declaración de guerra submarina sin restricciones, que amenazaba el transporte marítimo estadounidense y las vidas de los ciudadanos estadounidenses.

En febrero de 1917, la reanudación por parte de Alemania de la guerra submarina sin restricciones y su intento de forjar una alianza con México contra Estados Unidos llevaron al país al borde de la guerra. El presidente Wilson pronunció un discurso ante el Congreso solicitando una declaración de guerra, citando el imperativo de defender los derechos, principios y soberanía de la nación. El 6 de abril de 1917, Estados Unidos entró formalmente en la Primera Guerra Mundial, lo que marcó un importante punto de inflexión en su política exterior y participación global.