Los hombres y mujeres radicales de la clase trabajadora a menudo se organizan en sindicatos, partidos políticos y otras organizaciones para luchar por los derechos de la clase trabajadora. También pueden participar en acciones directas y otras formas de protesta para promover el cambio social. Creen en el poder de la organización colectiva para luchar contra la naturaleza explotadora del capitalismo y lograr un cambio económico, político y social genuino.