España llegó a dominar la mayor parte de América Latina como resultado de sus esfuerzos de colonización que comenzaron a finales del siglo XV. Hernán Cortés conquistó el Imperio azteca en 1521 y posteriormente el Imperio español estableció su dominio sobre gran parte de América Central y del Sur.
En cuanto a Portugal, centró principalmente sus esfuerzos colonizadores en la costa oriental de América del Sur, específicamente en Brasil. Pedro Álvares Cabral reclamó la tierra para Portugal en 1500, y Brasil permaneció bajo dominio portugués hasta el siglo XIX.