Historia de Europa

¿Qué se celebra en Zaragoza el 5 de marzo?

Cada 5 de marzo se celebra una curiosa fiesta en Zaragoza (España). Fue el primero de carácter laico y laico que tuvo la ciudad y que además tiene un nombre rimbombante:Cincomarzada . Pero, ¿qué celebran los zaragozanos cada cinco días de marzo?

Fernando VII Murió en septiembre de 1833, dejando una España anclada en el absolutismo y el Antiguo Régimen, pero donde los profesionales liberales, las grandes fortunas, y el que ha sido el sector social que acabará formando la alta burguesía, llevan más de veinte años clamando por a Cambio hacia el liberalismo político, donde el monarca y la aristocracia no hacen y deshacen lo que les da la gana y el poder pasa a esa burguesía cada vez más rica. Es la llamada Soberanía Nacional, que el Estado es del pueblo y no de la Corona, el concepto de libertades como la de prensa o la separación de poderes que aún hoy, doscientos años después, siguen siendo tan importantes. de moda.

Fernando VII tuvo grandes problemas para concebir un heredero, por lo que en caso de fallecer era su hermano, Carlos María Isidro de Borbón. quien era el primero en la línea de sucesión. Pero el inefable Fernando consiguió finalmente tener una hija en 1830, la futura Isabel II. ella se convierte en la heredera del trono. Carlos, absolutista convencido como su hermano, se vio de repente después de casi veinte años como el heredero relegado de la sucesión, y para colmo, relegado por una chica. Por ello, alude a la ley Sálica, que impide reinar a la mujer si hay un hombre, y comienza a buscar apoyos que también estén interesados ​​en preservar el modelo absolutista.

Por su parte, la esposa de Fernando VII, María Cristina ella, pese a ser profundamente absolutista, ve peligrar la futura sucesión de su hija Isabel, por lo que buscará el apoyo de los liberales. Así, en 1833 murió Fernando VII y pocos días después, su hermano Carlos publicó el Manifiesto Abrantes. , por lo que no reconoció como reina a su sobrina y se proclamó rey como Carlos V. Así comenzó la Primera Guerra Carlista (1833-1840), que tuvo gran fuerza en el actual Maestrazgo de Euskadi, Navarra, Aragonés y Castellón y zonas de Cataluña. Pero el carlismo tuvo sus bases en el mundo rural, y nunca logró tener una gran ciudad que le sirviera de capital.

Ante estas circunstancias, el 27 de febrero de 1834 grupos de civiles zaragozanos se reunieron en el Arrabal y Las Tenerías y comenzaron a provocar disturbios para provocar un levantamiento general a favor del pretendiente al trono, Carlos. A estos grupos de civiles se suma el apoyo del teniente general Juan Penne-Villemur. , Conde de Penne-Villemur. Sin embargo, el capitán general de Aragón, general Ezpeleta , se entera de lo sucedido y tras reunir un contingente armado y con el apoyo de la población de Zaragoza, reprime por la fuerza el levantamiento carlista, que huye hacia Navarra tras dejar varios muertos y finalmente se une a las tropas del carlista Tomás de Zumalacárregui. .

¿Qué se celebra en Zaragoza el 5 de marzo?

Cargo de Zumalacárregui – Augusto Ferrer-Dalmau (2009)

Llegamos al 5 de marzo de 1838 . Zaragoza es una ciudad que apoya el régimen liberal isabelino, pero está situada justo en medio de las regiones carlistas más importantes, por lo que siempre fue objeto de su deseo. El militar carlista turolense Juan Cabañero Decide -otras fuentes dicen que fue ordenado por el general Cabrera- tomar por sorpresa a Zaragoza y reúne 2.000 soldados de infantería y 300 de caballería. Cabañero aprovecha la calma de la noche para coger desprevenida a la guarnición de Zaragoza -muy escasa dado que el grueso había ido a socorrer a Gandesa, que se encontraba sitiada-, y a las 3 de la madrugada sus tropas, ayudadas por partidarios carlistas, numerosos en el barrio de Magdalena, toman la Puerta del Carmen, y tras cruzar las murallas comienzan a controlar el barrio de San Pablo y otras puertas de la ciudad. Los disparos y el "viva Carlos" despiertan a los zaragozanos y su reacción es inmediata. La milicia comienza a luchar contra los atacantes con el apoyo de toda la población, mujeres y hombres. La lucha dura todo el día y estallan feroces enfrentamientos en varios puntos de la ciudad como la Plaza de San Francisco -hoy Plaza de España-, el mercado, el Coso, etc. Los carlistas son atacados por todos lados y finalmente, hacia el anochecer. , Cabañero ordena la retirada. El general Cabrera recriminó a Cabañero su fracaso y acabó apartándole del mando del ejército carlista.

¿Qué se celebra en Zaragoza el 5 de marzo?

Para los zaragozanos esta victoria supuso una gran hazaña, y desde 1839 el Ayuntamiento lo declaró festivo, iniciándose la tradición. Los zaragozanos comienzan a acudir ese día a tomar un refrigerio a las arboledas de Macanaz y a la orilla del río Gállego, arraigándose la costumbre muy pronto.

En 1843, la facción más conservadora de los liberales logró el gobierno del país y el Ayuntamiento de Zaragoza dejó de declarar festivo el 5 de marzo, aunque los vecinos no quisieron perder esta costumbre y continuaron celebrándolo por su cuenta. Vuelve a ser festivo durante el llamado Bienio Progresista (1854-1856) y durante la Primera República (1873-1874), y finalmente de forma ininterrumpida con la Restauración Borbónica desde 1875. Incluso hay una calle dedicada a tal acontecimiento, la famosa Calle Cinco de Marzo junto al Paseo Independencia.

Los zaragozanos continuaron celebrando la Cincomarzada durante décadas hasta el estallido de la Guerra Civil (1936-1939). En 1937, el Ayuntamiento franquista de Zaragoza decidió abolir la festividad y prohibir su celebración, ya que el Movimiento Carlista formaba parte de los sublevados contra la Segunda República. La propia calle Cinco de Marzo cambió de nombre, pasando a llamarse “Requeté Aragonés” –los requetés eran las columnas de soldados carlistas-. Así se mantuvo la fiesta durante toda la dictadura, hasta que en 1979 el primer Ayuntamiento democrático de la ciudad recuperó la tradición y devolvió el nombre a la céntrica calle de Zaragoza.

Como último punto, hablar de una pequeña anécdota que contaron los zaragozanos. Durante la toma carlista de la ciudad, Cabañero lo vio tan fácil que dio por hecho la conquista, por lo que obligó a abrir un café al amanecer y pidió una taza de chocolate caliente. Pero justo cuando se disponía a beberlo comenzó el levantamiento popular de Zaragoza contra sus tropas, y Cabañero salió corriendo del café para dirigir a sus hombres sin haber bebido su taza. Años más tarde, Cabañero se unió al ejército isabelino y en una ocasión participó en un desfile militar en Zaragoza. Pero los zaragozanos, haciendo gala de su característico sarcasmo, le gritaron “¡¡Cabañero, se te está enfriando el chocolate!!”

Publicado en Historia de Aragón por Sergio Martínez Gil , licenciado en Historia por la Universidad de Zaragoza.