Entrada extraída del libro El Plantagenet
En algunas entradas del blog hemos hablado del momento crucial que supuso para la historia del país británico la conquista de Inglaterra por los normandos (ver el post dedicado al año 1066) . Tras el asentamiento de los normandos en el trono inglés se produjo otro acontecimiento, no pocas veces vinculado a un matrimonio que estaría destinado a cambiar la historia de Inglaterra y que está relacionado con la protagonista de esta entrada, la emperatriz Matilde.
Retrocedamos un poco en el tiempo; Después de la subida al trono del primer rey normando de Inglaterra, Guillermo "El Conquistador" fue sucedido por sus dos hijos, primero Guillermo II y luego Enrique I. Tuvo dos descendientes, Guillermo y Matilda. La sucesión parece asegurada con su hijo, pero entonces sucede algo que altera todos los planes del rey y la historia del país. Mientras los reyes de Inglaterra ostentan la soberanía en las tierras francesas de Normandía, la familia real viaja en barco entre las dos orillas del Canal de la Mancha. En uno de ellos, a bordo del Barco Blanco, el heredero Guillermo naufraga y perece. Es un episodio tratado en muchas obras de ficción y está narrado de forma detallada y amena en el blog original de Coresponsal en la Historia que recomiendo encarecidamente y cuya entrada enlace aquí para aquellos interesados en conocer más sobre este episodio:El Naufragio del Barco Blanco.
La muerte de Guillermo causa a Enrique I un enorme problema de sucesión; sólo tiene otra descendencia legítima y además de mujer es viuda y sin hijos. No hay nada regulado en la reciente monarquía anglo-normanda sobre la posibilidad de que una mujer herede la corona, pero para la mentalidad de la época en la que los reyes son los primeros en la línea de batalla, parece improbable que Matilde fuera aceptada como reina. . El juramento de los nobles de su reino al aceptarla parece, en vida y plena juventud de Enrique, poco más que letra muerta.
De hecho, el papel de Matilda, como es habitual en la época, es ofrecerla en compromiso a un monarca con el que su reino esté interesado en establecer relaciones más estrechas; en este caso con el emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, Enrique. De ahí su título de que, a pesar de la temprana muerte de su marido, siempre insistió en mantener a Matilde como emperatriz.
A la muerte del emperador, Matilda regresa a Inglaterra con un papel poco definido hasta la muerte de su hermano William; en ese momento Enrique I, a pesar del juramento antes mencionado, decide que es necesario volver a casarse con ella; si no tiene un heredero varón, es posible que pueda tener un nieto antes de morir. Y la elección del marido de su hija Matilda vuelve a ser una obra maestra de estrategia política:Godofredo de Anjou, un reino situado en la frontera sur de los dominios normandos de Enrique y que puede amortiguar la tensión con Francia. Los Anjou son conocidos como la dinastía "angevina" y Godofredo suele llevar en su sombrero una planta que se conoce en latín como "planta genesta".
Pero, como era de esperar, cuando Enrique I murió en 1135, los principales nobles del reino incumplieron el juramento de lealtad a su hija Matilda y se pusieron del lado de su sobrino Esteban. Esto provoca que el país se vea envuelto durante casi veinte años en una sangrienta guerra civil entre los partidarios de ambos candidatos al trono.
En 1148 Matilde se retira a Normandía y deja la defensa de su causa en manos de su hijo Enrique de Anjou. Enrique se convierte en duque de Normandía en 1150 cuando su padre le otorga su título y en conde de Anjou en 1151 cuando muere Geoffrey. Y el 18 de marzo de 1152, para sorpresa y escándalo de toda la cristiandad, se casó con Leonor de Aquitania, que hasta apenas dos meses antes había estado casada con Luis VII de Francia. El golpe de efecto es tremendo, no sólo por la humillación que supone para su rival francesa, sino porque sumando las propiedades de Leonor como duquesa de Aquitania y Poitou a las de Enrique en Normandía y Anjou, el matrimonio posee toda la parte occidental de Francia y sus dominios son iguales en extensión a los del rey francés.
En 1153 Enrique desembarca nuevamente en Inglaterra y después de varias escaramuzas su ejército se encuentra con el de Esteban en Wallingford. Allí, los soldados de ambos bandos se muestran reacios a entrar en combate, hartos de dieciocho años de muerte y destrucción inútiles. Enrique y Esteban se reúnen y acuerdan poner fin a la guerra, llegando al compromiso de que Enrique reconozca a Esteban como rey legítimo a cambio de que éste a su vez designe heredero a Enrique de Anjou. El acuerdo se sellará mediante actos solemnes primero en Winchester y luego en Londres.
Enrique regresa a Francia y allí escucha la noticia de la muerte de Esteban el 25 de octubre de 1154. Enrique II porta la corona inglesa y, junto con su formidable esposa Leonor de Aquitania, son coronada el 19 de diciembre del mismo año y comienza el reinado de la dinastía que ocuparía el trono inglés durante más de trescientos años:los Plantagenet.
A las recomendaciones habituales sobre entradas relacionadas con la Inglaterra medieval (Peter Ackroyd «La Historia de Inglaterra. Volumen I:Fundación»; Roy Strong «La Historia de Gran Bretaña»»Una Historia de Britain» de Simon Schama, con el cuidado trabajo propio de una producción de la BBC, y «Monarchy» de David Starkey), agrego otra serie en DVD de la BBC sobre reinas inglesas llamada «She Wolves» y en ficción la famosa novela “The Pillars of the La Tierra" de Ken Follet en la que el naufragio del "Barco Blanco" y Matilda tienen un papel protagonista.