En verano, la gente tiende a usar ropa más ligera, como pantalones cortos o faldas, camisetas y sandalias. En invierno, la gente usa ropa más abrigada, como abrigos, gorros y bufandas.
En general, la gente en la República Checa tiene una actitud relajada hacia la moda y el estilo personal, y tiende a vestirse de manera cómoda y práctica.