El cohete V-2 también fue conocido oficialmente como la "bomba zumbadora" por el gobierno alemán, pero el público británico lo conocía generalmente como la "bomba cohete" o simplemente el "cohete".
La bomba zumbadora V-1 fue concebida por el ingeniero alemán Robert Lusser de la Luftwaffe. La versión original iba a ser controlada por radio, pero esta idea fue abandonada en favor de un piloto automático simplificado. El V-1, propulsado por un motor de chorro de pulsos, era extremadamente lento y ruidoso. Su velocidad nunca superó las 400 mph (640 km/h), y a baja altitud el V-1 sólo viajaba a unas 350 mph (560 km/h).
El motor, montado sobre el fuselaje, emitía un sonido distintivo de "putt-putt", y debido a esto, el V-1 recibió el sobrenombre de "bomba zumbadora" o "Doodlebug". Tenía un alcance de alrededor de 150 millas (240 km). El V-1 pesaba alrededor de 2500 libras (1100 kg), de los cuales más de 1800 libras (820 kg) eran altamente explosivos.
La bomba se lanzaba desde rampas o raíles situados en el suelo. Se lanzaba verticalmente y, al cabo de unos segundos, el motor se encendía y continuaba ascendiendo hasta alcanzar su altitud de crucero de unos 2.500 pies (760 m). Luego, el V-1 viajaría a una velocidad constante hasta alcanzar su objetivo o quedarse sin combustible, en cuyo caso simplemente caería al suelo y explotaría.
La V-1 no era un arma muy precisa. A menudo se lanzaban en grandes cantidades con la esperanza de impactar en algo, pero la precisión era impredecible y las bombas frecuentemente caían en terreno abierto o en el agua. Sin embargo, la V-1 seguía siendo una amenaza para Londres y otras ciudades de Inglaterra. Se lanzaron más de 1.000 V-1 contra Londres, mataron a más de 6.000 personas y causaron daños generalizados.