1. Pérdidas Territoriales: Alemania perdió importantes territorios como resultado del tratado. Alsacia-Lorena fue devuelta a Francia, Eupen-Malmédy a Bélgica, Schleswig del Norte a Dinamarca y Prusia Occidental, Posen y Alta Silesia a Polonia. Alemania también perdió todas sus colonias de ultramar. Estas pérdidas territoriales ascendieron a aproximadamente el 13% del territorio de Alemania antes de la guerra y dejaron a muchos alemanes étnicos viviendo fuera de las fronteras de Alemania.
2. Reparaciones: Alemania estaba obligada a pagar reparaciones a las potencias aliadas como compensación por los daños causados durante la guerra. El importe total de las reparaciones se fijó en 132 mil millones de marcos oro (aproximadamente 33 mil millones de dólares), que debían pagarse en un período de 30 años. La carga de las reparaciones fue pesada y contribuyó a la inestabilidad económica y el malestar social en Alemania.
3. Restricciones militares: El ejército de Alemania quedó severamente restringido por el tratado. El ejército alemán quedó limitado a 100.000 hombres y la fuerza aérea y los submarinos fueron abolidos. A Alemania también se le prohibió importar o fabricar ciertos tipos de armas y tener un estado mayor. Estas restricciones tenían como objetivo evitar que Alemania recuperara su poder militar y comenzara otra guerra.
4. Cláusula de culpa de guerra: El artículo 231 del tratado, conocido como la "Cláusula de culpabilidad de guerra", asignaba a Alemania la responsabilidad exclusiva del estallido de la Primera Guerra Mundial. Esta disposición generó un gran resentimiento en Alemania y alimentó los sentimientos nacionalistas. Se convirtió en un punto de reunión para quienes sentían que Alemania había sido culpada y castigada injustamente por la guerra.