Hay algunas personas que sienten el llamado del Destino y siguen adelante. No lo evitan, lo buscan por una pasión, por un amor, por una idea. Para Kalliopi Avraam, de 78 años, en 1974, Grecia era todo eso junto. Por eso la heroica abuela decidió morir junto a los muchachos de ELDYK, desafiando a los