Durante la Revolución Rusa, que comenzó en 1917, el destino del zar Nicolás II y la zarina Alejandra dio un giro trágico. Esto es lo que pasó:
Abdicación y arresto:
- En febrero de 1917, surgieron protestas y huelgas generalizadas en Petrogrado (ahora San Petersburgo), alimentadas por las dificultades económicas y el descontento con el gobierno autocrático del zar.
- Ante una inmensa presión, el zar Nicolás II abdicó del trono el 15 de marzo de 1917, poniendo fin a los 300 años de gobierno de la dinastía Romanov sobre Rusia.
- El gobierno provisional, encabezado por Alexander Kerensky, arrestó al ex zar y a su familia en el Palacio Alexander en Tsarskoye Selo (Pushkin).
Mudarse a Siberia:
- En agosto de 1917, el gobierno provisional decidió trasladar a la familia Romanov a Tobolsk, una remota localidad de Siberia, por su seguridad.
- La familia, formada por el zar Nicolás II, la zarina Alejandra, sus cinco hijos (Olga, Tatiana, María, Anastasia y Alexei) y un pequeño séquito, fue escoltada en tren hasta Tobolsk.
- Vivían bajo estricta vigilancia y aislados del mundo exterior.
Ekaterimburgo y ejecución:
- Después de que los bolcheviques tomaran el poder en la Revolución de Noviembre de 1917, el ex zar y su familia fueron trasladados a Ekaterimburgo (Sverdlovsk), en los Urales.
- El Sóviet Regional de los Urales, controlado por la facción bolchevique, mantuvo cautivos a los Romanov en la Casa Ipatiev, una modesta mansión.
- En la noche del 16 al 17 de julio de 1918, en plena Guerra Civil Rusa, el Sóviet de los Urales decidió ejecutar a la familia imperial.
- El zar Nicolás II, la zarina Alejandra, sus cinco hijos y varios sirvientes leales fueron brutalmente asesinados a tiros y bayonetas por un pelotón de fusilamiento en el sótano de la Casa Ipatiev.
Consecuencias y exhumación:
- Los cuerpos de la familia Romanov fueron enterrados inicialmente en una tumba poco profunda cerca de la Casa Ipatiev. En 1991, tras la disolución de la Unión Soviética, sus restos fueron exhumados y sometidos a pruebas de ADN para su verificación.
- En 1998, los restos del zar Nicolás II, la zarina Alejandra y tres de sus hijas (Olga, Tatiana y María) fueron enterrados nuevamente en la Catedral de los Santos Pedro y Pablo de San Petersburgo.
- Los restos de Alexei y Anastasia fueron descubiertos más tarde y finalmente fueron enterrados junto al resto de la familia en 2007.
- La ejecución de la familia Romanov sigue siendo un acontecimiento controvertido en la historia de Rusia, que simboliza la naturaleza radical y violenta de la Revolución Rusa y sus secuelas.