- Poder Naval: Gran Bretaña era la potencia naval dominante en el mundo y su Armada Real era superior a la Armada francesa. Esto dificultó que Napoleón invadiera Gran Bretaña o transportar tropas y suministros a través del Canal de la Mancha.
- Sanciones Económicas: Gran Bretaña utilizó su poder naval para imponer sanciones económicas contra Francia. Estas sanciones impidieron que Francia importara bienes y recursos vitales y debilitaron la economía francesa.
- Apoyo financiero: Gran Bretaña brindó apoyo financiero a los enemigos de Francia, como el Imperio austríaco y Rusia. Este apoyo ayudó a mantener a Francia involucrada en una guerra costosa y prolongada.
- Oposición política: Gran Bretaña criticó abiertamente las políticas de Napoleón y alentó a otras potencias europeas a resistir la dominación francesa. Esto ayudó a crear una coalición de potencias europeas que finalmente derrotó a Napoleón.
En general, el poder naval, las sanciones económicas, el apoyo financiero y la oposición política de Gran Bretaña contribuyeron a que las conquistas de Napoleón en Europa fueran difíciles e insostenibles.