Historia antigua

9 curiosos remedios medicinales utilizados en la Edad Media

Muchos de los remedios medicinales utilizados en la Edad Media habían sido heredados de físicos y médicos antiguos. Aunque algunos se perdieron, otros se transmitieron de forma oral y otros quedaron recogidos en manuscritos que han llegado hasta nuestros días. De todos ellos, hay varios que nos parecen increíbles que eran utilizados a diario por curanderos, boticarios y médicos en Occidente.

Poción de San Pablo para gases intestinales, problemas de memoria o estomacales

Atribuida a San Pablo, esta pócima contenía regaliz, salvia, sauce, rosas, hinojo, canela, jengibre, clavo, sangre de cormorán, mandrágora, sangre de dragón y tres variedades de pimienta. El regaliz es bueno para la bronquitis y la tos; se pensaba que la salvia mejoraba la memoria y el flujo sanguíneo al cerebro; El sauce contiene ácido salicílico, que tiene acción antiinflamatoria y ayuda al flujo sanguíneo, por lo que es un componente de la aspirina. Respecto al hinojo, la canela y el jengibre son carminativos, es decir, ayudan a reducir los gases intestinales y podrían aliviar los calambres estomacales.

¿Qué propósito tendría la sangre de cormorán en esta poción? Aportaría hierro a una persona con anemia; La mandrágora, aunque venenosa, es un buen remedio para el insomnio cuando se utiliza en pequeñas dosis. La sangre de drago, que no sería tal, pero la resina del drago, árbol típicamente subtropical que encontramos en Canarias, Cabo Verde o Marruecos, tendría su aplicación como antiséptico, antibiótico, antiviral y cicatrizante; también algunas comunidades lo utilizan para tratar la disentería.

El remedio para la ciática

Este remedio lo encontramos en algunas recetas medievales que dicen más o menos así:

Quizás, el reposo en cama y la aplicación de calor en la zona dolorida puedan ser suficientes para mejorar, sin entrar en los beneficios de los ingredientes de este remedio.

La cura para quemaduras y rasguños

Este remedio casero podría ayudar a reducir las ampollas y aliviar el dolor. Investigaciones más o menos recientes han demostrado que la baba de caracol contiene antioxidantes, es antiséptica, anestésica, antiirritante, antiinflamatoria y tiene propiedades antibióticas y antivirales, con las mismas propiedades que el colágeno. Y lo mejor de todo es que la baba de caracol se comercializa desde hace algunos años para lesiones como cortes, quemaduras o rozaduras.

El remedio contra los orzuelos

Según el Bald's Leechbook, un antiguo manuscrito anglosajón que data de mediados del siglo X con instrucciones sobre remedios medicinales que se conserva en la Biblioteca Británica, para curar los orzuelos se debe seguir el siguiente procedimiento:

Está comprobado que la cebolla, el ajo y la hiel de toro tienen propiedades antibióticas que podrían usarse para curar un orzuelo. El vino contiene ácido acético que en nueve días podría reaccionar con el cobre del recipiente de bronce y formar sales de cobre, que son bactericidas. Y este remedio fue probado con éxito por estudiantes de la Universidad de Nottingham.

Y por la caída

La pócima utilizada también se basó en otra receta medieval que hoy consideraríamos abominable:

La cura para las migrañas

La fórmula maestra sería así:

La betonía fue utilizada por el boticario Tudor como ingrediente básico en remedios en infusión para todo tipo de dolencias y en cataplasmas tópicas. La medicina moderna todavía utiliza fármacos alcaloides presentes en la betonía para tratar las migrañas y los dolores de cabeza intensos. Los glucósidos derivados de la verbena también se utilizan en tratamientos modernos contra las migrañas, la depresión y la ansiedad.

En caso de una infección de garganta grave

En este caso, como en el remedio para la gota, se debía sacrificar un animal, en este caso se debía desollar un gato gordo al que había que eviscerar y limpiar perfectamente. Habría que tener grasa de erizo y grasa de oso, resinas, fenogreco, salvia, goma de madreselva y cera virgen. Todo sería desmenuzado y el gato sería disecado como un ganso. Asa todo y recoge la grasa que se debe aplicar al paciente.

Y para curar la tos

Hay que coger el jugo del marrubio y mezclarlo con diapenidion. Entonces cómelo. El marrubio es una planta de la familia de la menta y es buena para la tos; Por su parte, el diapenidion es un electuario, es decir, un preparado a base de verduras y miel o almíbar, que contiene agua de cebada, azúcar y clara de huevo.

Una pócima infalible para el estómago

Para evitar los gases que provocan los cólicos hay que utilizar comino y anís a partes iguales, remojarlo en vino y luego añadir más vino hasta cubrir esta mezcla y luego dejar reposar durante tres días y tres noches. Luego se retira y se coloca sobre un plato de ceniza durante nueve días. Pasado ese tiempo, cogemos todo y lo ponemos en una cazuela de barro hasta conseguir un polvo. Se añadirá a un guiso, un guiso o un brebaje y así se eliminarán los gases que son causantes de los cólicos. Tanto el comino como el anís son carminativos y se han probado con éxito en la época contemporánea.