- El embalsamamiento era el proceso de preservar un cadáver tratándolo con diversos productos químicos y materiales para evitar su descomposición. Los antiguos egipcios creían que el cuerpo era el recipiente del alma, por lo que era importante preservarlo para el más allá.
- El proceso de embalsamamiento podía durar hasta 40 días y lo realizaban sacerdotes especialmente capacitados.
- Primero se lavaba el cuerpo con agua y natrón (una sal natural) para eliminar posibles impurezas.
- Luego se extraían los órganos internos y se colocaban en tinajas, que eran enterradas con el cuerpo.
- Luego, el cuerpo se llenaría con natrón y otros materiales para ayudar a absorber la humedad restante y evitar la descomposición.
2. Momificación
- Después del embalsamamiento, el cuerpo era envuelto en vendas de lino. Este proceso se conocía como momificación y se creía que protegía al cuerpo de daños en el más allá.
- Las vendas se envolvieron firmemente alrededor del cuerpo, comenzando desde la cabeza y siguiendo hacia abajo.
- A menudo se colocaban amuletos y otros objetos entre las capas de vendajes para proteger el cuerpo de los malos espíritus.
3. Entierro
- Una vez finalizado el proceso de momificación, el cuerpo sería colocado en un ataúd y enterrado en una tumba.
- El ataúd a menudo estaba decorado con pinturas y jeroglíficos que representaban la vida y los logros del difunto.
- La tumba también estaba decorada con pinturas y jeroglíficos, y a menudo estaba llena de ajuar funerario como comida, ropa y joyas.