1. Enfermedad: La llegada de exploradores y colonos europeos trajo consigo enfermedades como la viruela, el sarampión y el tifus, que diezmaron a la población indígena de América. Se estima que hasta el 80% de la población azteca murió a consecuencia de estas enfermedades.
2. Disidencia interna: El Imperio Azteca no era una entidad monolítica y dentro de él había muchos grupos y facciones diferentes. Algunos de estos grupos no estaban satisfechos con el gobierno del emperador azteca Moctezuma II y estaban dispuestos a aliarse con los españoles para derrocarlo.
3. Tecnología militar: Los españoles tenían una ventaja significativa en tecnología militar, incluidas armas de fuego, cañones y armaduras de acero. Estas armas eran mucho más efectivas que las utilizadas por los aztecas y permitieron a los españoles derrotar a los ejércitos aztecas en una serie de batallas.
4. Liderazgo: Moctezuma II no fue un líder particularmente eficaz y cometió varios errores estratégicos que contribuyeron a la caída del Imperio Azteca. Por ejemplo, inicialmente permitió que los españoles entraran en Tenochtitlán, la capital azteca, sin luchar. Tampoco tomó medidas decisivas contra los españoles cuando comenzaron a construir sus propios barcos y armas.
5. Desastres naturales: El Imperio Azteca también se vio afectado por una serie de desastres naturales, incluidas sequías, inundaciones y terremotos. Estos desastres debilitaron la infraestructura del imperio y lo hicieron más vulnerable a los ataques.