El Neolítico fue testigo del cambio más significativo en la historia de la humanidad:la transición de un estilo de vida nómada, cazador y recolector, a una existencia agrícola sedentaria. Esta revolución agrícola condujo a la domesticación de plantas y animales, revolucionó la producción de alimentos y permitió el establecimiento de asentamientos y sociedades permanentes.
2. Cerámica:
El desarrollo de la alfarería y la cerámica en el período Neolítico revolucionó la forma en que los humanos almacenaban, cocinaban y transportaban los alimentos, así como la fabricación de recipientes para diversos fines. este avance allanó el camino para mejoras en la conservación de alimentos, las técnicas de cocina y la producción de artículos artísticos y decorativos.
3. Domesticación de animales:
Los humanos comenzaron a domesticar animales, como ovejas, cabras, vacas y cerdos, durante el Neolítico. Este desarrollo marcó el cambio hacia el pastoreo y la cría de animales, que complementaron la caza como fuente de alimento y proporcionaron recursos adicionales, como leche, cuero y lana.
4. Herramientas de piedra molida:
Los artesanos del Neolítico elaboraron herramientas de piedra más avanzadas, como hachas, azuelas y cinceles, mediante técnicas de esmerilado y pulido. Estas herramientas permitieron una mayor eficiencia al cortar, dar forma y trabajar con madera y otros materiales.
5. Arquitectura y técnicas de construcción:
Este período se caracterizó por la construcción de estructuras más sustanciales y complejas, incluidas casas, graneros y templos, utilizando materiales como piedra, madera y ladrillos de adobe. Esta evolución condujo al establecimiento de aldeas, pueblos e incluso ciudades.
6. Organización social y jerarquía:
A medida que las comunidades asentadas crecieron y requirieron una organización y una gestión de recursos más complejas, surgieron jerarquías sociales que llevaron al desarrollo de líderes, artesanos, agricultores y otros roles dentro de las sociedades.
7. Surgimiento de la religión y la espiritualidad:
Con condiciones de vida más estables y la necesidad de explicar los fenómenos naturales y las fuerzas que moldearon sus vidas, los humanos durante el período Neolítico desarrollaron creencias religiosas y prácticas espirituales. Esto marcó el comienzo de estructuras religiosas organizadas y el surgimiento de símbolos, rituales y monumentos sagrados.
8. Intercambio comercial y cultural:
A medida que las sociedades neolíticas crecieron y desarrollaron habilidades y recursos especializados, comenzaron a tener lugar intercambios comerciales y culturales entre diferentes regiones. Esta interacción difundió ideas, tecnologías y prácticas culturales entre diversas comunidades.