Antes de la Segunda Guerra Mundial, la Real Fuerza Aérea Yugoslava adquirió alrededor de 50 cazas biplanos británicos Hawker Fury I y II. Otros estaban propulsados por un motor Rolls Royce Kestrel XVI que les daba una velocidad máxima de 405 km por hora (x.a.h.), lo que los convertía en los avione