Factores históricos
* División Este-Oeste: El Imperio Bizantino era geográfica y culturalmente distinto del Imperio Romano Occidental. Constantinopla, la capital del Imperio Bizantino, estaba ubicada en el cruce de Europa y Asia, lo que la hacía más influenciada por las tradiciones y los idiomas orientales.
* Autonomía política: Después de la caída del Imperio Romano de Occidente en el siglo V, el Imperio Romano de Oriente continuó como una entidad separada e independiente, lo que le permitió desarrollar sus instituciones y prácticas religiosas por separado.
* Influencia imperial: Los emperadores bizantinos desempeñaron un papel importante en el desarrollo de la Iglesia bizantina. Los emperadores a menudo se involucraban en debates teológicos y convocaban concilios para definir y hacer cumplir doctrinas.
Factores culturales
* Influencia helenística: El Imperio Bizantino estuvo fuertemente influenciado por la cultura helenística, que enfatizaba la filosofía, la retórica y la literatura. Esta influencia moldeó el carácter intelectual de la teología y la espiritualidad bizantinas.
* Iconografía: El arte bizantino, en particular la veneración de iconos (imágenes religiosas), se convirtió en un aspecto importante de la vida religiosa bizantina. La iconografía jugó un papel importante en la transmisión de conceptos teológicos y la expresión de devoción.
Factores teológicos
* Tradición monástica: El Imperio Bizantino tenía una floreciente tradición monástica, que produjo teólogos y líderes espirituales influyentes. El monaquismo dio forma a la espiritualidad bizantina y enfatizó virtudes como el ascetismo, la oración y la contemplación.
* Controversia de Filioque: La disputa entre las Iglesias oriental y occidental sobre la redacción adecuada del Credo de Nicea condujo al Gran Cisma de 1054. El quid del debate se centró en la cláusula que afirma que el Espíritu Santo procede del Padre y del Hijo (Filioque), que añadió la Iglesia occidental, provocando una separación en las creencias y la comunión eclesiástica.
* Teología eucarística: La Iglesia Bizantina enfatizó una comprensión trascendental de la Eucaristía, enfocándose en la transformación del pan y el vino en el Cuerpo y la Sangre de Cristo a través de la acción del Espíritu Santo.
El Imperio Bizantino jugó un papel crucial en la preservación y transmisión del aprendizaje griego clásico, la teología cristiana y las tradiciones artísticas a los siglos y civilizaciones posteriores, incluida la influencia en la cultura de Europa occidental y el desarrollo del cristianismo ortodoxo moderno.