Descubrimientos arqueológicos

Pompeya, historia y recorrido virtual por las ruinas


Pompeya, historia y recorrido virtual por las ruinas El antiguo sitiode Pompeya constituye un testimonio arqueológico excepcional de la historia romana. La ciudad quedó enteramente sepultada durante la erupción del Vesubio el 24 de agosto de 79. Numerosas excavaciones arqueológicas han revelado casi las tres cuartas partes de la ciudad, que hoy constituye un testimonio único de la vida de una ciudad provincial italiana del siglo I d.C. Gracias a los milagros de la tecnología moderna, ahora es posible visitar el lugar cómodamente sentado en el sillón, a través de una cartografía de Google Maps que hemos integrado en este artículo. Visita guiada…

Historia de Pompeya, desde sus orígenes hasta la erupción del Vesubio

Pompeya era una antigua ciudad portuaria establecida cerca de Nápoles, en la costa de Amalfi, en la desembocadura del Sarnus (ahora Sarno). La ciudad, fundada alrededor del 600 a.C. BC por los oscos, fue conquistada más tarde por los etruscos y luego por los samnitas. El dictador Sila la convirtió en colonia romana (80 a. C.) y más tarde se convirtió en un popular centro turístico para los romanos ricos, con una población de alrededor de 20.000 habitantes. Situada entre Herculano y Stabies, en la desembocadura del Sarno, Pompeya desempeña un importante papel comercial en el opulento valle del río, como puerto de las ciudades de Nola, Nuceria y Acerra. Durante el Imperio Romano, Pompeya, ciudad provincial de tamaño medio, poblada por comerciantes y artesanos, fue especialmente apreciada por su entorno excepcional y se convirtió en una auténtica ciudad turística para los romanos ricos.

Pompeya, historia y recorrido virtual por las ruinas La ciudad resultó gravemente dañada por un violento terremoto el 5 de febrero del 62 d.C. J.-C. (primicias de la erupción volcánica). Algunos edificios aún están siendo restaurados cuando, en la tarde del 24 de agosto del 79, el Vesubio despierta y, en pocas horas, entierra todo lo que hay en sus proximidades; Pompeya no se salva y, en la mañana del día 25, no queda rastro de la ciudad. Pompeya no desaparece bajo un deslizamiento de tierra -como es el caso de su vecina Herculano-, sino bajo una capa de 4 a 6 m de ceniza ardiente y lapilli de piedra pómez. La erupción fue tan violenta que también alteró el curso del río y levantó el frente marítimo, situando el río y la orilla a una distancia considerable de los restos de la ciudad actualmente visibles.

Descubrimientos arqueológicos

Pompeya permaneció bajo un manto de cenizas y lapilli durante más de 1.500 años. No fue hasta 1748 que se emprendieron excavaciones. La importancia de los hallazgos fue revelada por primera vez por el trabajo del arqueólogo alemán Johann Joachim Winckelmann. Después de 1870 se llevaron a cabo nuevas excavaciones y, a partir de 1924, los arqueólogos iniciaron excavaciones estratigráficas para reconstruir la arquitectura de los edificios enterrados.

Pompeya, historia y recorrido virtual por las ruinas Varias casas fueron desenterradas en una calle que conecta Strada dell'Abbondanza con el anfiteatro. Esta zona de la ciudad se llama Nuovi Scavi (“nuevas excavaciones”). Algunas ruinas resultaron gravemente dañadas por los bombardeos aéreos de la Segunda Guerra Mundial y tuvieron que ser restauradas. Constantemente se realizan nuevas excavaciones y aún queda por descubrir más de una cuarta parte de la ciudad.

La mayoría de los edificios públicos datan de finales del siglo II y principios del I a.C. En general, los edificios públicos combinan elementos arquitectónicos del arte griego, por ejemplo las cámaras centrales de los templos, con elementos característicos de la arquitectura romana. En el suroeste de la ciudad, alrededor de la explanada del foro se concentran los principales edificios religiosos, administrativos y comerciales de Pompeya. Por último, la ciudad cuenta con varios baños termales, dos de los cuales son públicos:los baños del Foro y los baños de Estabia.

Las ruinas de Pompeya:un tesoro al aire libre

Un aspecto importante de los hallazgos realizados en Pompeya es el notable grado de conservación de los objetos. La lluvia de cenizas y lapilli que acompañó a la erupción selló herméticamente la ciudad y protegió los numerosos edificios públicos, templos, teatros, baños, tiendas y casas. El lugar también alberga los restos de unas 2.000 víctimas del desastre, incluidos varios gladiadores que aún están encadenados. Las cenizas mezcladas con el agua de lluvia formaron una especie de moho alrededor de los cuerpos que permaneció cuando los cadáveres se convirtieron en polvo.

Pompeya, historia y recorrido virtual por las ruinas Los investigadores vertieron yeso líquido en algunos de estos moldes naturales para encontrar la forma de los cuerpos en día del desastre. Puedes ver algunos de estos moldes de los cuerpos en el Museo de Pompeya, cerca de la Puerta Marina, una de las ocho puertas de la ciudad. Más allá de la Puerta de Herculano, la Villa de los Misterios alberga toda una serie de copias romanas inspiradas en pinturas griegas.

La mayoría de los residentes lograron escapar con sus pertenencias personales. Regresaron después de que terminó la erupción y cavaron túneles en casas y edificios públicos para apoderarse de objetos de valor. Ésta es la razón por la que en Pompeya se descubrieron pocos objetos de gran valor. Los allí recolectados fueron colocados en el Museo Nacional de Nápoles, así como los frescos y mosaicos más notables que abundan en el sitio. El conjunto de edificios y objetos ofrece una imagen excepcionalmente completa de la vida de una ciudad italiana de provincias del siglo I d.C. Los edificios supervivientes marcan una transición entre el estilo griego puro y los métodos de construcción del Imperio Romano y, como tales, son particularmente importantes para el estudio de la arquitectura romana.

El sitio arqueológico de Pompeya es ahora Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Para ir más lejos

- Pompeya, guía de viaje.

- Pompeya. Vida en la ciudad romana de Mary Beard. El umbral, 2012.

- Pompeya - Antigüedad redescubierta, por Jean-Marc Irollo. Libro de arte, 2014.

- El recorrido virtual


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