Durante la Edad Calcolítica, los humanos comenzaron a utilizar el cobre para fabricar herramientas, armas y otros objetos. El cobre era relativamente fácil de obtener y trabajar, y era más duro y duradero que la piedra, que había sido el material principal utilizado para las herramientas en el Neolítico. El uso del cobre permitió el desarrollo de nuevas tecnologías y técnicas, como la fundición y la fundición, y también propició un aumento en la producción de bienes.
La Era Calcolítica también vio el desarrollo de otras tecnologías importantes, incluido el arado, que permitió una agricultura más eficiente, y la rueda, que permitió el transporte de mercancías y personas a largas distancias. Estos avances tecnológicos llevaron a un mayor intercambio comercial y cultural entre diferentes regiones, y también contribuyeron al crecimiento de las ciudades y al surgimiento de civilizaciones.
La Edad Calcolítica fue un período importante en la historia de la humanidad, ya que marcó el comienzo del uso de la metalurgia y el desarrollo de tecnologías que tendrían un impacto duradero en las sociedades humanas. Allanó el camino para la Edad del Bronce y el posterior surgimiento de civilizaciones en todo el mundo.