Casas de césped También eran comunes en la frontera. Estaban hechos de bloques de césped cortados del suelo y apilados uno encima del otro. Las casas de césped solían tener una sola habitación y suelo de tierra. Eran frescas en verano y cálidas en invierno, pero también oscuras y húmedas.
Casas de madera Se construyeron utilizando un marco de montantes de madera que se recubrieron con tablas. Las casas de madera eran más caras de construir que las cabañas de troncos o las casas de césped, pero también eran más duraderas. Generalmente eran de dos o tres habitaciones y tenían un altillo para dormir.
refugios Eran hoyos que estaban excavados en la ladera de una colina. Los refugios solían ser de una sola habitación y tenían suelo de tierra. Eran frescas en verano y cálidas en invierno, pero también oscuras y húmedas.
Carpas También fueron utilizados por los pioneros. Las tiendas de campaña eran fáciles de montar y desmontar, lo que las hacía ideales para personas que se movían con frecuencia. Sin embargo, las tiendas de campaña no eran muy resistentes a la intemperie y, a menudo, hacían frío y humedad.
Independientemente del tipo de casa en la que vivieran, los pioneros tenían que ser ingeniosos y autosuficientes. Tuvieron que construir sus propios hogares, cultivar sus propios alimentos y confeccionar su propia ropa. La vida en la frontera era difícil, pero también gratificante.