Tierra y territorio: Los españoles también estaban interesados en expandir su imperio y adquirir nuevas tierras. Veían las Américas como un territorio vasto e inexplorado que podía ser reclamado para España.
Almas para convertir: Los españoles eran católicos devotos y estaban ansiosos por difundir su religión entre los pueblos indígenas de América. Creían que era su deber convertir a los nativos al cristianismo y llevarlos al redil de la Iglesia católica.
Gloria y honor: Los exploradores españoles también estaban impulsados por un deseo de gloria y honor. Querían ser recordados como grandes exploradores y conquistadores y estaban dispuestos a arriesgar sus vidas y soportar grandes dificultades en pos de sus objetivos.