Witold Aleksander Herbst, piloto del Escuadrón 303, recordó que cuando escoltaba una expedición de bombarderos estadounidenses B-17 cuatrimotores en 1944, notó que un pequeño avión ascendía muy rápidamente. Su piloto tuvo que ser valiente:solo atacó 250 Fortalezas Voladoras, protegidas por cien caza