A continuación se muestran algunos ejemplos específicos de cómo cambiaron los sentimientos durante el transcurso de la Primera Guerra Mundial:
* Al comienzo de la guerra, había un fuerte sentido de patriotismo y orgullo nacional. La gente se alistaba voluntariamente en el ejército e hacía sacrificios en el frente interno para apoyar el esfuerzo bélico.
* A medida que la guerra se prolongaba, estos sentimientos comenzaron a dar paso a la desilusión y la desesperación. Los soldados experimentaron los horrores de la guerra de trincheras y fueron testigos de la muerte y destrucción que causó la guerra. Los civiles se cansaron del racionamiento y las restricciones que se les impusieron.
* Al final de la guerra, había una sensación general de alivio por el fin de los combates, pero también una profunda sensación de pérdida y trauma. La guerra se ha cobrado la vida de millones de personas y muchas más han resultado heridas o desplazadas.
La Primera Guerra Mundial tuvo un profundo impacto en la psicología de las personas que la vivieron. Destrozó sus ilusiones sobre la guerra y les dejó una profunda sensación de trauma. La guerra también provocó un declive de la fe religiosa y un aumento del secularismo.