1. Luchas de poder: Juan frecuentemente chocaba con la iglesia por cuestiones de poder y autoridad. Le molestaba la influencia de la iglesia e intentó limitar sus privilegios e inmunidades. En particular, se opuso al control de la iglesia sobre ciertos asuntos legales y financieros.
2. Fiscalidad: Juan impuso fuertes impuestos al clero, lo que tensó aún más su relación con la iglesia. Exigió que el clero pagara impuestos a la corona y trató de controlar los ingresos de la iglesia. Esto provocó conflictos con los líderes de la iglesia, incluido el arzobispo de Canterbury.
3. Nombramientos eclesiásticos: Juan interfirió en el nombramiento de obispos y otros funcionarios de la iglesia, que era una prerrogativa tradicional de la iglesia. Trató de influir en estos nombramientos por razones personales y políticas, sin tener en cuenta los procedimientos eclesiásticos adecuados.
4. Disputas por tierras: John tuvo disputas con las autoridades de la iglesia sobre la tierra y los derechos de propiedad. Se apoderó de tierras y propiedades de la iglesia, lo que enfureció al clero y provocó conflictos.
5. Excomunión: En 1209, el Papa Inocencio III excomulgó a Juan por negarse a aceptar a Stephen Langton como arzobispo de Canterbury. La excomunión fue un duro golpe a la autoridad de Juan y provocó malestar político y social en Inglaterra.
6. Reconciliación: En 1213, Juan se reconcilió con la iglesia después de aceptar importantes concesiones, incluido el reconocimiento de Langton como arzobispo y una restitución financiera. Sin embargo, las tensiones y conflictos entre Juan y la iglesia continuaron durante todo su reinado.
7. Carta Magna: La firma de la Carta Magna en 1215, si bien no estuvo directamente relacionada con la iglesia, tuvo implicaciones para la relación entre la corona y la iglesia. La carta incluía disposiciones que protegían los derechos y libertades del clero, dando forma aún más a su relación con la monarquía inglesa.
En general, la relación del rey Juan con la iglesia estuvo marcada por luchas de poder, disputas sobre autoridad, impuestos e interferencia en asuntos eclesiásticos. Fue una relación compleja y a menudo conflictiva que tuvo implicaciones significativas tanto para el reinado de Juan como para la dinámica política y religiosa más amplia en Inglaterra durante el siglo XIII.