Los elementos clave de la estrategia de salto de isla en isla incluyeron:
- Recopilación de inteligencia y reconocimiento:el ejército estadounidense utilizó inteligencia recopilada de diversas fuentes, incluido reconocimiento aéreo, descifrado de códigos e informantes locales, para identificar y seleccionar islas objetivo adecuadas para la invasión.
- Desembarcos anfibios:Estados Unidos se basó en asaltos anfibios para capturar islas. Estas operaciones involucraron fuerzas de desembarco coordinadas, apoyo de fuego naval y poder aéreo para superar las defensas japonesas.
- Establecimiento de superioridad aérea y naval:la Armada y la Fuerza Aérea de los EE. UU. trabajaron juntas para establecer control sobre el aire y el mar alrededor de las islas objetivo. Esto les permitió proporcionar cobertura aérea a las tropas durante los desembarcos e interrumpir las líneas de suministro y refuerzos japoneses.
- Asegurar y desarrollar las islas capturadas:una vez que una isla fuera capturada, las fuerzas estadounidenses la asegurarían y establecerían bases militares y aeródromos. Estas bases se utilizarían luego como puntos de parada para futuras operaciones.
- Pasando por alto las islas fortificadas:Estados Unidos pasó por alto los bastiones japoneses fuertemente fortificados, como Truk y Rabaul, que habrían sido costosos y difíciles de capturar. En cambio, se centraron en capturar islas que eran estratégicamente importantes pero menos bien defendidas.
- Cortar las líneas de suministro japonesas:al capturar islas clave, Estados Unidos podría cortar las líneas de suministro japonesas e interrumpir su capacidad para reforzar y reabastecer sus fuerzas. Esto debilitaría sus capacidades defensivas y les haría más difícil resistir el avance estadounidense.
La estrategia de ir de isla en isla resultó exitosa al debilitar gradualmente al ejército japonés y provocar su eventual derrota. Al final de la guerra, Estados Unidos había capturado numerosas islas estratégicas en el Pacífico, incluidas Iwo Jima y Okinawa, y estaba preparado para invadir el territorio continental japonés antes de que Japón se rindiera en agosto de 1945.