Historia de América del Norte

¿Eran los bolcheviques seguidores de rasputín?

Los bolcheviques, una facción dentro del Partido Laborista Socialdemócrata Ruso que finalmente tomó el poder en la Revolución de Octubre de 1917, no eran seguidores de Grigori Rasputin. En cambio, lo vieron como un símbolo de la corrupción y decadencia del régimen zarista que buscaban derrocar.

1. Diferentes ideologías: Los bolcheviques eran un partido revolucionario marxista inspirado en las ideas del socialismo y el comunismo. Buscaban establecer una dictadura proletaria y desmantelar el capitalismo. Por otro lado, Rasputín era un campesino místico impregnado de creencias religiosas y misticismo. Su influencia se produjo predominantemente dentro de la Iglesia Ortodoxa Rusa y promovió una mezcla de tradicionalismo, superstición y prácticas curativas.

2. Opuestos políticos: Los bolcheviques se oponían políticamente al régimen zarista, sobre el que Rasputín tenía una influencia significativa. Rasputín estaba estrechamente asociado con la familia del zar, especialmente con la emperatriz Alejandra, y a menudo intervenía en asuntos políticos, proponiendo sus propios candidatos e influyendo en las políticas. Esta participación lo puso en conflicto con los bolcheviques y otros grupos políticos progresistas que lo veían como una fuerza corruptora en el gobierno.

3. Postura antisistema: Los bolcheviques eran fundamentalmente antisistema y pretendían derrocar el orden social y político existente. Consideraban el régimen zarista como un símbolo de opresión, desigualdad y explotación, y buscaban desmantelarlo por medios revolucionarios. Rasputín, por otra parte, era parte del establishment, disfrutaba de estrechos vínculos con la élite gobernante y utilizaba su influencia para dar forma a los acontecimientos dentro del sistema existente.

4. Secularismo versus mística religiosa: Los bolcheviques estaban impulsados ​​por una ideología secular que rechazaba la influencia religiosa en la política y la sociedad. Abogaban por la completa separación de la Iglesia y el Estado y pretendían combatir el papel dominante de la Iglesia Ortodoxa Rusa, que Rasputín representaba y promovía.

5. Percepción pública: La reputación de Rasputín entre el público en general también influyó en la actitud de los bolcheviques hacia él. Fue ampliamente percibido como un manipulador, oportunista y fuente de escándalo y corrupción dentro de la corte del zar. Los bolcheviques aprovecharon esta imagen negativa para desacreditar aún más al régimen contra el que luchaban.

En resumen, los bolcheviques veían a Rasputín como un místico religioso reaccionario y una herramienta del régimen zarista, al que se oponían rotundamente. Sus diferencias ideológicas, objetivos políticos y orientación secular los enfrentaron con Rasputín y alimentaron aún más su determinación de derrocar al gobierno zarista.