Los misioneros españoles intentaron convertir a los nativos americanos al catolicismo y asimilarlos a la cultura española. Este proceso de asimilación a menudo implicó la supresión de lenguas, costumbres y creencias nativas. Muchos nativos americanos se resistieron a este proceso y algunos se rebelaron contra las misiones.
Enfermedad
Los españoles también trajeron consigo enfermedades como la viruela, el sarampión y la influenza, contra las cuales los nativos americanos no tenían inmunidad. Estas enfermedades diezmaron a la población nativa y mataron a millones de personas.
Esclavitud y trabajo forzoso
Muchos nativos americanos se vieron obligados a trabajar en las misiones y en los ranchos españoles. A menudo fueron sometidos a duras condiciones y bajos salarios. Algunos nativos americanos también fueron vendidos como esclavos.
Pérdida de Tierra
Los españoles se apoderaron de grandes extensiones de tierras de los nativos americanos, a menudo sin compensación. Esta pérdida de tierra tuvo un impacto devastador en el modo de vida nativo.
Destrucción cultural
Los misioneros españoles a menudo destruyeron artefactos religiosos y culturales de los nativos americanos. Esta destrucción fue un intento de borrar las culturas nativas y reemplazarlas con la cultura española.
Disminución de la población
La combinación de enfermedades, esclavitud, trabajos forzados, pérdida de tierras y destrucción cultural provocó una disminución de la población nativa americana de Alta California. Este descenso ha continuado hasta nuestros días.
La llegada de los misioneros españoles a Alta California tuvo un impacto profundo y duradero en la vida de muchos nativos americanos. Los misioneros trajeron consigo una nueva religión, nuevas enfermedades y una nueva forma de vida. Estos cambios a menudo tuvieron un impacto devastador en los pueblos nativos.