Liechtenstein es uno de los países más pequeños del mundo. Hoy su población es de aproximadamente 38.000 habitantes. El pequeño principado está situado entre Austria y Suiza. El pequeño estado alemán tiene una larga historia ligada a la del Imperio Habsburgo.
Liechtenstein es actualmente uno de los países más ricos del mundo con un ingreso per cápita de 140.000 dólares. Hoy el país no tiene ejército sino sólo una pequeña fuerza policial. Para su defensa confía en Suiza.
Hasta 1866, cuando la derrota de Austria dio como resultado que Prusia (y luego una Alemania unificada) asumiera la primacía alemana, Liechtenstein estuvo obligado a proporcionar poder militar bajo obligaciones feudales medievales. Hasta entonces mantuvo un ejército de una compañía compuesta por 80 hombres... Después de todo, la casa de Liechtenstein había proporcionado grandes generales a los Habsburgo hasta las guerras napoleónicas.
Sin embargo, durante la Primera Guerra Mundial, Liechtenstein envió un destacamento para ayudar a los austriacos. Se desconoce el número de hombres que integraban el destacamento en cuestión. ¡Pero lo extraño es que el destacamento cuando regresó al país contaba con más hombres que cuando salió!
Los hombres de Liechtenstein no realizaron el servicio de combate. Durante todo el tiempo que permanecieron al servicio de Austria, custodiaron el paso del Brennero. Pero cuando terminó la guerra y regresaron, tenían otro soldado con ellos.
Algunas fuentes dicen que fue un desertor italiano que los siguió con la intención de establecerse allí y evitar un consejo de guerra. Según otra fuente, el destacamento de Liechtenstein contaba con 58 hombres y a ellos se añadió un oficial austriaco.
Según una variante de la historia, el oficial era del ejército austríaco, pero de origen italiano. Cualquiera que sea la verdad, el "ejército" de Liechtenstein es el único en la historia que regresó "más fuerte" de lo que salió.
Durante la Segunda Guerra Mundial, el pequeño principado de Liechtenstein, gracias al apoyo suizo, logró no ser absorbido por la Alemania hitleriana, a diferencia de Austria.
Liechtenstein había asignado, durante la guerra, su representación diplomática a Suiza. Por supuesto que había pronazis en el país, pero también habían fundado un partido. Sin embargo, por decisión del príncipe Francisco José II del país, el partido nazi se disolvió en 1943, sin ganar nunca ninguna influencia.
La justificación oficial para su disolución fue su predicación antijudía y el intento de sus miembros de unirse a las Waffen SS. Liechtenstein era un refugio seguro para varios judíos. Además, la esposa del anterior príncipe, Francisco I, era de origen judío austríaco.
- La foto muestra a soldados suizos en la frontera con Liechtenstein.