Röhm nació en Munich, Baviera, hijo de un funcionario ferroviario. Se unió al Ejército Imperial Alemán en 1906 y sirvió como oficial durante la Primera Guerra Mundial. Después de la guerra, se involucró en la política de derecha y se unió al Partido Nazi en 1919. Rápidamente ascendió en las filas y se convirtió en uno de los más importantes de Hitler. lugartenientes de confianza.
En 1923, Röhm y Hitler fueron arrestados por su papel en el Beer Hall Putsch, un intento de derrocar al gobierno de Weimar. Röhm fue condenado a cinco años de prisión, pero fue puesto en libertad después de cumplir sólo unos meses. Después de su liberación, reorganizó las SA y las transformó en una poderosa fuerza paramilitar.
A principios de la década de 1930, Röhm y las SA desempeñaron un papel clave en el ascenso de los nazis al poder. Las SA intimidaron a sus oponentes políticos, interrumpieron las manifestaciones de la oposición y ayudaron a Hitler a consolidar su control sobre Alemania. Sin embargo, las ambiciones de Röhm y el creciente poder de las SA comenzaron a preocupar a Hitler y otros líderes nazis. Temían que Röhm y las SA se estuvieran volviendo demasiado independientes y que pudieran representar una amenaza para el régimen nazi.
En junio de 1934, Hitler ordenó a las SS que llevaran a cabo una purga de los dirigentes de las SA, incluido Röhm. El 30 de junio de 1934, Röhm fue arrestado y trasladado a la prisión Stadelheim de Munich. Al día siguiente, agentes de las SS lo mataron a tiros.
La muerte de Röhm marcó el fin de las SA como fuerza poderosa dentro del régimen nazi. También marcó un punto de inflexión en la consolidación del poder de Hitler, ya que eliminó una de las últimas amenazas potenciales a su autoridad.