Proclamación de Amnistía :
En noviembre de 1837, la Corona británica emitió una Proclamación de Amnistía, ofreciendo perdón a todos aquellos que habían participado en la Rebelión excepto los responsables del asesinato de los leales.
Informe de Lord Durham:
En 1839, Lord Durham presentó su informe sobre el estado de la América del Norte británica, conocido como Informe Durham. El informe proporcionó un análisis exhaustivo de las causas de la rebelión y recomendó cambios significativos en la gobernanza de las colonias, incluida la introducción de un gobierno responsable.
Gobierno responsable:
En la década de 1840, el gobierno británico comenzó a implementar los principios de gobierno responsable en la Norteamérica británica. El gobierno responsable permitió a las colonias tener un mayor control sobre sus propios asuntos, y el consejo ejecutivo pasó a ser responsable ante la asamblea legislativa electa.
Reformas Eclesiásticas:
La Corona tomó medidas para abordar los agravios religiosos, en particular los de la población católica francesa en el Bajo Canadá. En 1841, la Ley Sydenham estableció la jerarquía católica romana y proporcionó mayores fondos para la educación católica.
Desarrollo económico:
El gobierno británico apoyó varias iniciativas de desarrollo económico para mejorar las condiciones económicas en las colonias. Estas incluyeron inversiones en infraestructura, como canales, carreteras y puentes, así como medidas para promover el comercio y los asentamientos.
Unión de los Canadás:
En 1840, el Parlamento británico aprobó el Acta de Unión, que fusionó el Alto y el Bajo Canadá en la Provincia de Canadá. La unión tenía como objetivo crear una entidad política más estable y unificada y abordar algunas de las tensiones entre las dos colonias.