2. Pérdida de población: La guerra también provocó una gran pérdida de población en Europa. Millones de personas murieron en los combates y millones más fueron desplazados de sus hogares. Esto tuvo un impacto significativo en la demografía de la región y creó una gran cantidad de refugiados que tuvieron que ser reasentados.
3. Disrupción económica: La guerra también causó perturbaciones económicas generalizadas en Europa. Muchas fábricas y negocios fueron destruidos y el comercio quedó interrumpido. Esto provocó una disminución de la producción y un aumento del desempleo. La guerra también dejó a muchos países con grandes deudas, lo que les dificultó la reconstrucción.