1. Cardenal Richelieu (1585-1642):
- El cardenal Richelieu fue primer ministro de Luis XIII desde 1624 hasta su muerte en 1642. Se le considera una de las figuras más influyentes en la configuración del absolutismo francés.
- El objetivo de Richelieu era fortalecer la monarquía y centralizar el poder en manos del rey. Creía que una monarquía fuerte era esencial para mantener la estabilidad y el orden en el reino.
- Richelieu implementó varias políticas para lograr su objetivo. Reprimió rebeliones internas, como la de los hugonotes protestantes, y debilitó el poder de la nobleza reduciendo sus privilegios y controlando su poder militar.
- También amplió los territorios de Francia mediante conquistas militares y alianzas diplomáticas, aumentando el prestigio y la influencia del país en Europa.
2. Cardenal Mazarino (1602-1661):
- El cardenal Mazarino sucedió a Richelieu como primer ministro de Luis XIII y más tarde sirvió como consejero y tutor de Luis XIV hasta su muerte en 1661.
- Mazarino continuó la política de Richelieu y consolidó aún más el poder de la monarquía. Reprimió la Fronda, una serie de rebeliones de la nobleza y la burguesía, que amenazaban la estabilidad del reino.
- Mazarino también negoció la Paz de Westfalia en 1648, que puso fin a la Guerra de los Treinta Años y dio a Francia importantes ganancias territoriales.
- Acumuló una gran riqueza y poder, pero también enfrentó críticas y resentimiento por parte de la nobleza francesa, que resentía su origen extranjero y su influencia sobre el rey.
Juntos, el cardenal Richelieu y el cardenal Mazarino desempeñaron papeles cruciales en la transformación de Francia de un estado feudal descentralizado a una monarquía absolutista centralizada, allanando el camino para que Luis XIV estableciera su gobierno personal y fuera conocido como el "Rey Sol".