1. Victoria rápida y decisiva:
En 1066, Guillermo invadió Inglaterra y derrotó decisivamente a las fuerzas inglesas lideradas por el rey Harold II en la batalla de Hastings. Esta victoria rápida y abrumadora estableció su autoridad y desalentó una mayor resistencia de los nobles anglosajones.
2. Brutalidad y Miedo:
William empleó una dura política de retribución y castigo para someter cualquier posible rebelión. El infame acontecimiento conocido como "El acoso del Norte" demostró su voluntad de utilizar la fuerza brutal para infundir miedo y desalentar la disidencia.
3. Construcción de castillos Motte-and-Bailey:
Para mantener el control sobre los territorios conquistados, William ordenó la construcción de numerosos castillos motte-and-bailey en toda Inglaterra. Estas fortalezas fortificadas sirvieron como centros de poder normando y ayudaron a reprimir los levantamientos locales.
4. Confiscación de Tierras Anglosajonas:
William confiscó sistemáticamente las tierras y propiedades de los nobles anglosajones derrotados y las distribuyó entre sus seguidores normandos. Esta política debilitó a la élite terrateniente tradicional y la reemplazó con partidarios leales del nuevo régimen.
5. Lealtad de los barones normandos:
William recompensó a sus barones normandos por su apoyo con amplias concesiones de tierras y posiciones de poder. Esto creó una red de vasallos leales que tenían un interés personal en mantener la autoridad de William.
6. Sistema Feudal:
William introdujo el sistema feudal en Inglaterra, que estableció una estructura jerárquica de tenencia de la tierra y obligaciones militares. Este sistema reforzó aún más el control de la aristocracia normanda y aseguró su lealtad.
7. Normanización:
William promovió el uso de la lengua y la cultura francesas en Inglaterra, reemplazando gradualmente las costumbres y tradiciones anglosajonas. Este proceso de "normalización" tenía como objetivo asimilar a los ingleses a la sociedad normanda dominante.
8. Tributación y Administración Centralizada:
William implementó un sofisticado sistema de impuestos y administración centralizada, asegurando un flujo constante de ingresos y una gobernanza eficiente del reino.
En general, la combinación del rey Guillermo I de destreza militar, alianzas estratégicas y medidas administrativas efectivas le permitió establecer y mantener con éxito el control sobre Inglaterra. Su reinado marcó el comienzo de la era normanda y tuvo un profundo impacto en la historia, la sociedad y la cultura inglesas.